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miércoles, 20 de octubre de 2010

El guardián de las tumbas

 Andrés Emilio Zapata
Laura Pulgarín
Paula Hoyos

En el cementerio de San Pedro cuentan que una noche el celador estaba de turno en la ronda diaria,  tenía un perro guardián, su única compañía. Después de caminar un rato, el perro se quedó quieto y ladrando al frente de la estatua de San Miguel Arcángel. El celador asustado alumbró y sólo vio la estatua. Este se fue para la puerta y escuchó al perro con una respiración muy agitada; cuando voltió y alumbró vio correr una sombra. La respiración del perro seguía, el celador volvió a alumbrar y no había nada, desde entonces el perro anda como una sombra en el cementerio.

Hay quienes aseguran que el perro es negro y que se mantiene cuidando las tumbas; también se habla de que cuando los perros ahullan es porque hay un alma cerca de aquel lugar donde ellos están. Afirman las personas que este perro es de una raza agresiva y que también tiene unos ojos muy grandes.

Una noche, mientras el celador estaba de turno, vio pasar una sombra bastante grande.Entonces salió a buscar la sombra pensando que era una persona; cuando llego al lugar donde la vio, el empezó a senir un gran peso encima y a lo lejos vio unos ojos grandes.Después empezó a escuchar un perro ladrar y sintió un respiro muy fuerte en sus pies. Salió muy asustado para la puerta por temor al perro que cuidaba las tumbas.

Este trabajo realizado en la red de escritores nos sirvió para darnos cuenta de que cualquier cosa, con un poco de interés podemos hacer una gran investigación

Tambien conocimos un gran lenguaje, el cual antes no habiamso utilizado, aprendimos como hacer una noticia y un texto.Conocimos como hacer una crónica. 

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